LOEWE, ha vuelto a ser Loewe.
Ha dejado la extravagancia para volver a presentarnos diseños elegantes, originales y trabajados. Pasad por la calle Serrano donde esta ubicada una de sus tiendas, y podéis disfrutar del diseño de sus bolsos, de sus zapatos cómodos a pesar de llevar tacón, con una forma original que los hace especiales, y sobre todo, hay un vestido blanco largo en crepe de algodón con un diseño muy trabajado, la falda va plisada, la cintura drapeada, y las hombreras con un fruncido, con escote en V, combinado con un cinturón negro de raso con un lazo.
La flor del anturio es el fetiche de la colección.