¿Contabilizas tus prendas?
Los consejos que te dan las revistas de moda para vestir bien. ¿Qué es vestir bien? Se traduce en ¿Dónde? ¿Cuándo? ¿Cómo? Siempre se acierta con fondos de armario y colores neutros más que con tendencias arriesgadas como cuando nos proponen estampados, los estampados hay que valorarlos detenidamente, debes prestar atención, podemos decir de una mujer que val mal o bien vestida en la elección de ese dibujo, color, forma y tejido de un estampado.
Lo que os proponen en la venta low cost suelen estar elaborados en tejidos de mala calidad y estampados poco atractivos a precios muy bajos. ¿En cuántos lavados van a ir desapareciendo los colores?
¿Cuánto dura un estampado en el armario? La verdad es que no dura tres temporadas como puede ser la elección de colores neutros. La vida que le doy es de un año. ¿Por qué? Porque los estampados aburren a las mujeres, este es el proceso: Empiezas con la ilusión de estrenarlo y a medida que repites va perdiendo ese encanto y atractivo de la primera vez, y lo acabas dejando en un rincón del armario escondido para no verlo, y lo llegas aborrecer. Si no te sobra el dinero, si no te sobra espacio en tu casa, y tienes que economizar en espacio y dinero no inviertas en estampados. Por supuesto, que en el armario debemos tener de todo y variado, los estampados son prendas de capricho a las que no se les saca tanto partido.
La temporada de rebajas es poco atractiva porque te repiten una y otra vez las diferentes marcas lo mismo. La moda en estas fechas se convierte en un cromo repetido, a no ser que tengas muy claro lo que necesitas con vistas de futuro puestas en la primavera que despierten tu interés como un futuro inmediato para estrenar con tejidos más livianos.
El otro día escuché a un chico joven en la calle comentar a su amigo cuántas veces se había puesto el abrigo este invierno, lo llevaba contabilizado. ¿Los hombres hacen cuentas a la hora de amortizar sus prendas?
Yo no sé cuántas veces me he puesto el abrigo este invierno. No conozco a nadie que contabilice cuántas veces te pones una prenda. Las prendas te traen recuerdos o historias que contar.
El hombre tiene un cerebro diferente de la mujer cuándo va de compras. Su actitud es otra, lo tienen más claro, por regla general, no tardan tanto tiempo en comprar. Parece como si se hubieran estudiado las tendencias y sus compras son rápidas y seguras. Se vende con más facilidad a un hombre que a una mujer. Pregunta a las dependientas. El problema es cuando van acompañados por la mujer o la novia, es entonces cuando la compra o la venta tarda en materializarse.