Elige tu comportamiento
El inicio de la semana ha llegado con situaciones que nos sorprenden. En realidad, han sido dos situaciones relacionadas con el comportamiento que tenemos como ciudadanos. El primero ha sido el ocurrido en la Universidad Complutense, cargada de violencia verbal hacía una política, con alto cargo como es ser la presidenta de la Comunidad de Madrid....
Por supuesto, que todo el mundo puede manifestarse y reclamar aquel político al que sus medidas les afecta. En el exterior de las instalaciones no en el interior del edificio donde se tenía preparado el acto para lo que han sido invitados que no llamados a manifestarse a grito pelado.
La Universidad ha permitido en su interior el espectáculo en el que han participado tanto los de una ideología política como de otra. Han empezado el acto con el discurso cargado de polémica por parte de una de las elegidas como ilustre alumna, Elisa Treviño.
Rechazaba la presencia de la presidenta de la Comunidad de Madrid, y halagaba a su Universidad, cuando ha sido su universidad que ha invitado a la presidenta. A quien tienes que gritar es al rector y a los docentes, por la decisión de invitarla a recibir el mismo honor que tú. No se trataba de un acto político. No era el momento ni el lugar. Isabel Díaz Ayuso, iba en calidad de ex alumna.
¿Se imaginan esta situación en Estados Unidos de América? Lo primero que hacen al primer grito, es evacuar el edificio de insolentes, lo segundo invitan a la ilustre alumna a salir antes de finalizar su discurso a grito pelado Se procede con los bedeles o agentes de seguridad de la Universidad si los hubiera, o en su defecto evacuar lo antes posible a la presidenta de la Comunidad de Madrid. Cuando se tiene que echar mano de la policía, mal asunto.
En cuanto a que no se merecía la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, el honor de ilustre alumna, pueden ser dos motivos por los que le den tal concesión: Por sus buenas calificaciones o por el cargo público que ostenta y el hecho de haber realizado sus estudios superiores en la Complutense. Que haya un alto cargo político en el poder y que haya realizado sus estudios superiores en la Universidad Complutense, bien merece un reconocimiento que beneficia más a la Universidad que a la propia presidenta de la Comunidad de Madrid.
Las universidades europeas de Oxford y Cambridge, hacen honores a todos los altos cargos políticos que han salido de su Universidad, independientemente de su ideología política. Hablamos de la cultura anglosajona. Por no hablar de Harvard. Todas las Universidades del mundo lucen con orgullo aquellos que un día fueron sus alumnos y ahora son hombres y mujeres que se han preparado en su institución para llegar a ser lo que representan.
Con este comportamiento han deslucido el acto, y han dejado la imagen de su universidad sin los valores que representa. Su imagen ha quedado dañada. Esto si que es vergonzoso no lo que voy a relatar ahora:
El embajador de la
República Islámica de Irán, Hassan Ghashghavi, no ha estrechado la
mano de la reina Letizia. "Pero es que al rey si le ha dado la mano
y a la reina no" comenta con desaprobación un periodista. Esta es la segunda noticia que causa estupor entre algunos.
El país al que representa el embajador de Irán, nos tenemos que fijar en la palabra Islámica como parte del nombre oficial del país. Los occidentales debemos entender que muchas de sus leyes se apoyan en su religión. No es vergonzoso que no haya dado la mano a la reina, como he podido leer en algunos titulares de la prensa digital, su religión que es su ley no le permite tener contacto físico con una mujer.
Perdón, la que no ha tenido el comportamiento que debe tener ante
esta situación inesperada es la reina, Letizia. No debió mirarle con gesto de sorpresa,
le debió devolver el saludo tal y como el embajador se lo expresó,
con una leve inclinación y la mano derecha en el pecho a la altura
del corazón. Ha sido una falta de cortesía por parte de la reina,
dejando al descubierto su falta de atención.