Feria de Sevilla, moda, tradición y cultura.
Antes de que lleguen los meses de las primeras comuniones, bodas y bautizos, llega la Feria de Abril. Ya se acerca la Feria de Sevilla, se oyen a lo lejos, las palmas, los pasos y las castañuelas. Las mujeres se preparan para esta fiesta que une tradición y cultura...
Al menos, una vez en la vida, hay que ir a la Feria de Sevilla. Llevamos dos años sin celebrar la Feria de Sevilla. Este año se espera con entusiasmo.
Un espectáculo digno de ver y de disfrutar. Sevilla se transforma a partir del encendido del alumbrado que es cuando oficialmente empieza la Feria. A las 12 en punto de la noche.
Es un buen momento de elegir un traje de faralaes para acudir a esta cita esperada a lo largo del año.
Los extranjeros que visitan nuestro país y acuden a esta fiesta, se sorprenden del ambiente, y se sienten atraídos por la belleza de la mujer española. Se come, se bebe, y se bailan sevillanas hasta la tantas de la madrugada, sin olvidar el paseo de caballos que se celebra a las 12 de la mañana, las mujeres se visten para la ocasión. Y por la tarde a la plaza de toros. Así todos los días, durante una semana.
Hombres y mujeres se visten para los encuentros en estos ambientes de forma cuidada y elegante. Tenemos la oportunidad de ver al verdadero "señorito andaluz" bailar las sevillanas como se deben bailar, sin levantar los brazos ni tocar a la mujer. Solo la acompaña en los pasos. Cada sevillana se compone de cuatro partes, en cada una de ellas al final de cada una, el hombre y la mujer se juntan el la toma por la cintura y ella levanta un brazo mirando a los ojos de su acompañante. Así hasta cuatro veces.
Se vive un ambiente donde destaca la cultura y tradiciones del sur de España, con alegría y felicidad.